Entre otras cosas, las anotaciones de Palmero revelan que los gastos de la esposa de Alberto, la princesa Charlene, superaban con creces su salario oficial. Entre 2011 y 2019, gastó alrededor de 15 millones de euros, incluidos 860.000 euros en la decoración de su despacho de palacio y 826.000 euros en reformas estéticas de su villa corsa. Palmero asegura que en abril de 2016, Charlene llegó a gastar 66.000 euros en un solo día. «Es una locura -se quejó en su diario-. – No tengo control sobre sus gastos».
Las notas de Palmero mencionan a dos de los hijos ilegítimos conocidos de Alberto: Jasmine Grimaldi, de 31 años, hija del príncipe y de la agente inmobiliaria Tamara Rotolo, y Alexandre Coste-Grimaldi, de 20 años, hijo del príncipe y de la ex azafata Nicole Coste.
Para Jasmine, Albert compró un piso de tres millones de euros en Nueva York y le transfería 86.000 dólares cada tres meses. Para Alexander, contrató un seguro en caso de secuestro extorsivo. Además, Albert ayudaba a su madre a mantener una boutique en Londres. Esto le costaba alrededor de un millón de euros al año.